¿Qué es el azúcar?
El azúcar es un término muy amplio e incluye diferentes significados. Es importante entenderlos para controlar la ingesta de azúcar en la alimentación infantil.
El término azúcar total se refiere tanto al azúcar naturalmente presente en los alimentos como al azúcar libre. El azúcar se encuentra de forma natural en las frutas, hortalizas y algunos granos, así como en forma de lactosa en la leche y los productos lácteos. Mientras que el azúcar libre es definida, por la Organización Mundial de la Salud (OMS), como todos los monosacáridos y disacáridos añadidos a los alimentos y bebidas por el fabricante.
El entorno alimentario actual se caracteriza por un suministro barato y abundante de azúcar y un incremento continuo de su consumo. En las últimas décadas, la ingesta de bebidas azucaradas (bebidas que contienen edulcorantes calóricos añadidos, como la sacarosa, el jarabe de maíz con alto contenido de fructosa, los concentrados de jugo de frutas) ha aumentado dramáticamente, en especial en la población infantil.
¿Cómo es el consumo de azúcar en Argentina?
Por un lado, los últimos resultados del Estudio Latinoamericano de Nutrición y Salud (ELANS) arrojaron que nuestra población, en promedio, consume 114,3 gramos de azúcar por día, siendo este el consumo más alto de la región según la recomendación de la OMS, que sugiere un consumo máximo de 50 gramos por día de azúcar en adultos. Mientras que, en la población infantil, la recomendación establece que no es necesario su consumo hasta al menos los 2 años de edad.
Por otro lado, en la segunda Encuesta de Nutrición y Salud (ENNyS 2), se evidenció que la población argentina consume a diario o frecuentemente alimentos no recomendados como bebidas azucaradas, productos de pastelería, productos de copetín y golosinas. Esta situación es alarmante. Además, al comparar poblaciones según edad, el patrón alimentario de niños, niñas y adolescentes es significativamente menos saludable que el de los adultos. La población infantil consume un 40% más de bebidas azucaradas y el triple de golosinas con respecto a los adultos.
¿Cómo impacta el consumo excesivo de azúcar en la salud infantil?
El consumo excesivo de azúcar libre, especialmente en forma líquida, está vinculado con una serie de complicaciones para la salud, tanto a corto como a largo plazo. Por ejemplo, el surgimiento de caries dentales y la presencia de sobrepeso y obesidad a edades tempranas.
Los resultados de las ENNyS 2 evidenciaron que el exceso de peso en niños y niñas menores de 5 años de edad es de 13,6%. Mientras que los niños, niñas y adolescentes de 5 a 17 años de edad presentan un 41,1% de exceso de peso. Esta problemática también se refleja en la población adulta argentina, presentando una prevalencia de 67,9% de exceso de peso en mayores de 18 años de edad.
Analizando estos números podemos decir que la epidemia de sobrepeso y obesidad en nuestra población existe y que las cifras aumentan en los diferentes grupos etarios. Por este motivo es necesario buscar soluciones a partir de buenas políticas en salud pública y educación alimentaria para toda la población.
¿A cuántas cucharaditas equivale el azúcar en los alimentos y bebidas?
La recomendación en adultos es no sobrepasar las 12 cucharaditas de azúcar al día, mientras que niños se aconseja no consumirla. Teniendo en cuenta esto, a continuación, se detallará la cantidad de azúcar expresada en cucharitas que tienen ciertos alimentos y bebidas que suele consumir la población infantil.
- Un vaso de leche chocolatada: 6 cucharaditas.
- Un vaso de jugo de naranja envasado: 6 cucharaditas.
- Un alfajor simple: 4 cucharaditas.
- Un chupetín: 4 cucharaditas.
- Un yogur recomendado a partir de los 6 meses: 3 cucharaditas.
- Dos unidades de vainillas: 4 cucharaditas.
La equivalencia se realizó tomando en cuenta la recomendación de la OMS, donde una cucharadita equivale a 4 gramos. Es importante que cada adulto responsable de un menor tenga en cuenta esta información para poder realizar elecciones alimentarias consientes que no comprometan, en un futuro, la salud del niño. Como recomendación general: más alimentos reales, menos productos de paquete.