El Síndrome Urémico Hemolítico es una enfermedad muy grave y muy frecuente en Argentina (somos el país con más casos en el mundo).
Lo más común es que ocurra en niños de 6 meses a 5 años.
Es producida por una bacteria (Escherichia coli O157:H7) que se encuentra en el agua o en alimentos, principalmente la carne de vaca, aunque también en lácteos sin pasteurizar y frutas o verduras mal lavadas.
Puede encontrarse en la superficie de la carne cruda o mal cocida. La carne picada es uno de los productos de mayor riesgo porque al molerla, la bacteria ingresa al interior, donde es más difícil que alcance la temperatura necesaria para eliminarla durante la cocción.
Al ingerirla llega al intestino y daña muchos órganos, en particular los riñones , pudiendo generar insuficiencia renal y hasta llevar al trasplante.
¿Qué síntomas produce?
Diarrea (en general con sangre), vómitos, dolor abdominal, fiebre, falta de apetito, decaimiento, palidez, deshidratación, disminución en la cantidad de orina. En la piel pueden verse manchitas rojas como puntos o moretones (por disminución de las plaquetas).
¿Cómo podemos prevenirlo?
Como no hay tratamiento específico, lo más importante es prevenirlo.
- Evitar darle carne picada (hamburguesas, albóndigas, pasteles de carne, salsa Bolognesa, etc.) a los menores de 5 años (si lo deseamos , se puede cocinar un trozo de carne entero y luego lo picamos en casa, ya cocido)!
- Cocinar bien la carne, que no esté jugosa ni rosada en el centro. Tener especial cuidado con la carne picada, ya que generalmente se cocina bien la parte superficial, permaneciendo la bacteria en el interior. El jugo de la carne, debe ser completamente transparente.
- Evitar el contacto de las carnes crudas con otros productos.
- Para cortar verduras u otros alimentos, no usar el mismo cuchillo o superficie (tablas, mesadas) que se uso para cortar carne cruda.
- No consumir lácteos sin pasteurizar y conservar la cadena de frío.
- Lavar cuidadosamente verduras y frutas.
- Lavarse las manos antes de preparar los alimentos, de comer y luego de ir al baño o cambiar pañales.
- Consumir agua potable; ante la duda, hervirla.
A tener en cuenta estas recomendaciones y cuidar a nuestros niños/as!